miércoles, 21 de septiembre de 2016

Elvira García y la Defensa de los Derechos de la Mujer a Inicios del Siglo XX

Portada de la Obra "La Mujer Peruana a través de los Siglos: Serie historiada
de estudios y observaciones" (1924) de la educadora
 chiclayana Elvira García y García.
Es conocido que la célebre dama chiclayana Elvira García y García Berth fue “una destacada educadora y escritora, fundadora de los jardines para la infancia en 1902 y de la Academia de Enseñanza Superior de Mujeres en 1920”.  A la ya conocida información anterior, el presente artículo integra su profunda vocación de lucha por el reconocimiento de los derechos de la mujer en un tiempo en que la intelectualidad dio mayor importancia a este tema, hecho evidenciado en la frecuencia creciente de los ensayos sociológicos sobre esta problemática. Desde la segunda década del pasado siglo empieza a perfilarse una nueva imagen de la mujer con respecto a sus capacidades laborales, condiciones para la educación y salubridad, esto último a partir de los principios del higienismo de mediados del siglo XIX.
Según Gladys Díaz, expresidenta de la Cámara Peruana del Libro “La sociedad peruana de los siglos pasados se caracteriza por una mentalidad y conducta social machista y patriarcal…La historia nos ha mostrado que no han sido valoradas ni escuchadas, sino silenciadas y no reconocidas como líderes de opinión” (Díaz, 2009).
En 1924 se celebró en Lima la Conferencia Panamericana de Mujeres. La maestra Chiclayana Elvira García y García Berth aprovechó la ocasión para presentar el libro “La mujer peruana a través de los siglos: serie historiada de estudios y observaciones”. La obra narra una serie de historias de mujeres, desde el Tahuantinsuyo hasta inicios del siglo XX, mostrando en cada una el espíritu de sacrificio, deseo de superación, resistencia y lucha contra corriente de la mujer. La visión tradicional sobre la mujer percibida por García y García, según la escritora española Inmaculada Lergo, era la de compañera y amiga de su hermano o de su esposo; la de una persona socialmente frívola “a la sombra” sin reconocimiento social… una persona a la que se conoce poco y se juzga equivocadamente. Según García y García “Se le niegan sus derechos civiles y políticos, temiendo que, en el ejercicio de ellos, descienda de ser la eterna niña. Se limita su cultura intelectual, cortándole las alas muy temprano. Se sostiene que, con la ciencia rudimentaria que bebe en aquellos centros culturales, que la moda y las costumbres imponen, tiene suficiente, pensando que, es peligroso dejarla marchar muy allá”.
Documento de Mercedes Gallagher, Presidenta del Tercer Congreso
Científico Panamericano, dirigido a Esther Festini de Ramos, Presidenta del
Comité Internacional de Universitarias Graduadas; comunicando
la aprobación a la publicación de la obra de Elvira García y García.

El escritor e historiador peruano Emilio Gutiérrez de Quintanilla, fundador de la Academia Peruana de la Lengua, fue quien prologó la obra con ideas conservadoras acorde a la corriente de inicios del siglo XX, así enuncia a la mujer como una persona poco agresiva que se gloría en el sacrificio del deber cumplido; reservada; reservada y alejada del feministo (feminismo) que, según Gutiérrez “propende dejar en vacancia, la función fisiológica, conservadora de la especie, para invadir órbitas absolutas y permanentemente masculinas […]”. El prologuista emite una sentencia: “Ni a la mujer, ni al hombre, le es lícito, dejar de ser los tipos armónicos, que hizo la naturaleza y definirlos en la bella frase de Napoleón Bonaparte: La mujer es poesía: el hombre es prosa. Nina Scott, investigadora de la Universidad de Massachussets, refiere que la obra de García y García “es un compendio fascinante de información biográfica sobre mujeres peruanas desde tiempos precolombinos hasta la época de la escritora” (Scott, 1992).
Según Gloria Bautista Gutiérrez, en sus “Voces femeninas de Hispanoamérica” (1996) “En el siglo XX la mujer ya no era vista como un mero adorno. Tenía su propia voz frente a la crítica que había empezado a valorar su calidad ideológica”.

La segunda década del siglo XX es la de la participación decidida de mujeres es pos de conseguir mejores derechos. Dicha lucha dista del feminismo y de la actual ideología de género en gran medida. Flora Tristán argumentó “Reclamo derechos para la mujer para que se tome en consideración su educación y porque de la educación de la mujer depende la del hombre en general… “Más adelante, estas palabras suyas sería de gran inspiración para Elvira García y García  “Yo escribo para que ustedes sepan, para que comprendan, grito para que me oigan, voy, adelante para mostrarles el camino”. A la fecha, esta lucha no ha terminado.

lunes, 5 de septiembre de 2016

Versiones sobre la "santidad" de la niña Isabel Miranda de Monsefú. 1917

Fotografía de la niña Isabel Miranda ("santa" Isabel) de Monsefú.
Año 1917, en su lecho de muerte. Fotografía del
Historiador Miguel Díaz Torres.

La religiosidad popular en Lambayeque ha tenido y tiene manifestaciones dignas de ser resaltadas, y estudiadas. En pleno siglo XX, en 1973, según reportó el Diario La Industria en sucesivas ediciones del mes de agosto, una niña afirmó haber visto a la Santísima Virgen María en el Distrito de Olmos (Tineo, 2016); el mismo diario y otras fuentes periodísticas hicieron mención a la supuesta aparición de la Virgen en los vidrios de un domicilio en el sector “9 de octubre” de la ciudad. Esto, por mencionar algunos casos en los que el imaginario popular recrea situaciones supuestamente espirituales. Una de ellas, tal vez, la que más ha llamado la atención en el pasado siglo ocurrió en 1917 en el Distrito de Monsefú teniendo como personaje principal a la niña Isabel Miranda. Sobre tal hecho, Pedro Dávalos, historiador de inicios del siglo XX y estudioso de este caso, mencionó: “Casos como ése ocurren en la sierra y en la costa…” (Dávalos, 1919)

Según el maestro e historiador monsefuano David Ayasta, “(Para el pueblo de Monsefú) 1917, (es un) año en el que coinciden dos hechos de gran arraigo en la mentalidad monsefuana: La masacre de los integrantes de la banda del silencio y la explosión de fanatismo expresado hacia la Santa Isabel de Monsefú. La tradición oral refiere una combinación de pobreza en los hogares y robos nocturnos por la época. Se dice que la Santa Isabel, durante sus ataques de catalepsia (sic), pronosticó (frente a los feriantes que curiosos se acercaron a ella) la muerte de los facinerosos de la banda del silencio…” (Ayasta, 2010)

El párroco de Monsefú Manuel Ríos, según el historiador Miguel Díaz Torres, acerca de los supuestos prodigios de la llamada santa Isabel, dijo: “no habido milagros ni profecías, lo único que hizo fue engañar a la gente ignorante, asegurando que hablaba con los muertos y la gente la visitaba y le dejaba flores, plata y velas… al ver que la idolatraban, pedía le besen las manos y los pies y hacia le laven esas extremidades, y esa agua servía para curar decían, muchos la bebieron y aseveraron que era milagrosa… a pesar de muerta, muchos seguían haciendo negocio (como los fotógrafos) la gente afirmaba que en su sepulcro continuaba incorruptible y con los ojos abiertos, mucha gente ha llegado de la sierra y le pide milagros y deja dinero en resumen : para el párroco" la miranda fue una histérica, cataléptica y tísica" (Díaz, 2015)

La niña Isabel Miranda, fallece un 29 de diciembre de 1917 y, según Díaz Torres, los diarios de la época le dedicaron extensos comentarios. “Algunos resaltaron los 67 días que pasó sin comer ni beber. Otro diario dice que fue envenenada en algún momento y no hizo efecto el veneno, además de atribuirle milagros, visiones celestiales y prodigios místicos. Que la mano divina la había señalado” (Díaz, 2015) y refiere, además, la manifestación del Dr. Muro Pacheco, médico tratante en Monsefú, sobre el real estado de salud de la supuesta niña santa: “En uno de los primeros días de diciembre se me llamó a Monsefú, allí volví a encontrar a la Srta. Isabel en estado cataléptico, con respiración y circulación regulares, y una paraplejia con rigidez en miembros inferiores, dilatación de las pupilas, que creo fue debido a los parásitos intestinales que debían haber sido la causa de su catalepsia… de paso sea dicho que de histeria y catalepsia nadie se ha muerto, pero la familia de la Srta. Isabel descuidó su alimentación de la enferma que contribuyó a su inanición” (Díaz, 2015).

Este hecho, estudiado en la época, por el historiador Pedro Dávalos y Lissón en su obra “La Primera Centuria” refiere: “El fanatismo popular, rico siempre en fantasía, suele santificar a las personas que se distinguen por su virtud o por sus dolencias catalépticas. Últimamente ha llamado la atención el caso de Isabel Miranda, una niña enferma en Monsefú, a quien la población indígena atribuyó misión divina para convertir a los hombres… Las gentes ignorantes de las vecindades, sugestionadas por lo que se les contaba, se apresuraron a rodearla y a rendirla culto. Con habilidad e imaginación forjáronse historias de milagros y predicciones que pusieron en gran alboroto a Monsefú y a las comarcas vecinas. Como era de esperar, los médicos del departamento negáronse a practicar los reconocimientos solicitados por la autoridad política, temerosos de desvanecer la ilusión de las gentes fanáticas y de provocar la ira popular. El cura quedó todavía en peor situación. ¡Pobre de él que hubiera pronunciado la palabra catalepsia! …” (Dávalos, 1919).

La iglesia Católica por aquel tiempo no refirió versión alguna sobre el hecho y se apoyó en la versión del Párroco Ríos.



lunes, 4 de julio de 2016

Breve Historia de la Capilla "Nuestra Señora de Lourdes" de la Urbanización Patazca de Chiclayo

De izquierda a derecha: Sra. María Sahuma, Padre Juan Mechán,
Sra. Leonor Doig, Monseñor Jesús Moliné, Sra. Victoria Zamora,
Sra. Julia Morales y Padre José Antonio Jacinto Fiestas

En la década de 1970 las familias de la Urbanización Chiclayo (Patazca) anhelaban la construcción de una capilla en la zona. Jurisdiccionalmente pertenecían a la Parroquia “San Juan María Vianey” a cargo del venerable sacerdote canadiense Juan Tomis Stack. Para saciar aquel hambre de Dios, el Padre Tomis decidió celebrar misas los días domingos a las 11.00 am en el Parque “Leoncio Prado” de dicha urbanización, la celebración se realizaba bajo un frondoso árbol, las familias acudían cada una con su propio mobiliario. La Sra. Bertha Ambulódegui de López Torres, recuerda “El Padre Tomys pasaba con sus acólitos y coro en su camioneta por toda la urbanización tocando su campana anunciando su llegada a las 10.30 am. Y la misa empezaba a las 11.00 am. El Sr. Rázuri ponía parlantes en el balcón de su casa tocando cánticos de misa”. La Sra. María Enriqueta Terán Vda. De Guerrero, afirma “El altar era una mesa prestada por la Sra. Violeta Hurtado… nos repartían boletines de la parroquia y ensayábamos las canciones con los jóvenes (del coro). Para navidad se instalaba en el lugar un pesebre. No teníamos misa para Semana Santa, íbamos a la parroquia”.
Se instaló un Comité Pro Construcción conformado por los Sres. Tirso Aldana, Carlos Rázuri, Jorge Prieto y Luis Jabiles; además de las  Sras. María Enriqueta de Guerrero, Teresa Pastor, Victoria Zamora, Julia Morales, Rosa Castro, Bertha de Obando, Victoria Hurtado, Ruby de Peralta, Bertha López Torres y las Hnas. Pilar, Teresa y Elena Pizarro; Se solicitó, entonces, a la Municipalidad de Chiclayo la donación de un terreno para la construcción de un salón parroquial. Durante la gestión edilicia de Don Flavio Núñez Izaga se cedió en uso un terreno de 400 metros cuadrados en la II etapa de dicha urbanización, de un total de 500 metros cuadrados considerados por el Sr. Rinaldi, ejecutor de la obra de urbanización, para parque y/o colegio. Las obras de construcción de la capilla (antes salón parroquial) se iniciaron a inicios de la década de 1980.
Señala la Sra. María Enriqueta vda. de Guerrero “el arquitecto Chullén hizo planos de la capilla ocupando toda el área, estos fueron descartados y luego hizo los de un solo salón, que fue lo que se construyó. El Ing. Ibañez, vecino de la zona, dirigió la construcción con un maestro de obras…”. Las familias del sector se identificaron con la donación de dinero y materiales de construcción. Al respecto la Sra. Bertha Ambulódegui, recuerda “no se recibió apoyo económico de la Diócesis. Probablemente si ayuda económica del extranjero pues el padre Tomis tenía benefactores que lo apoyaron en la construcción de las capillas de los sectores Quiñones, Túpac Amaru, etc.”
Por iniciativa del Sr. Tirso Aldana se adquieren las primeras bancas para el salón parroquial. La adquisición fue gracias a las familias del sector que donaron 1 banca por familia, más en algunos casos. La inauguración y consagración de la Capilla de “Nuestra Señora de Lourdes” se realizó el 08 de diciembre de 1985 y estuvo a cargo del Obispo de Chiclayo Monseñor Ignacio María de Orbegozo y Goicoechea. La imagen de "Nuestra Señora de Lourdes" fue adquirida por el Padre Tomis en 1982.
El año 2000 se crea la Parroquia de “Nuestra Señora de Guadalupe” y se integra en ella a la Capilla “Nuestra Señora de Lourdes” de la Urbanización Patazca. Su párroco, Presbítero José Antonio Jacinto Fiestas autorizó la continuación y ampliación de la construcción de la capilla. En tal circunstancia, la Sra. Leonor Doig junto a las Sras. Victoria Zamora y Julia Morales, convocan y gestionan junto a los vecinos de la zona los recursos necesarios para tal fin a través de colectas y diversas actividades encabezadas por ellas y que les han merecido el aprecio y respeto de los vecinos de dicho sector.
Hoy, la Capilla ofrece diariamente servicios litúrgicos. Cuenta con un aforo para 250 personas cómodamente sentadas. Tiene un salón multiusos con dos baños y cocina para servicios sociales y mortuorios y un extenso patio.

Entre muchos otros sacerdotes, desarrollaron su ministerio en dicha capilla los presbíteros Juan Tomis, Francisco Poloshnys, Sefred Bietighofer, Isaac de Vega, Eutiquiano Saldón, Angel Arrebola, Elky Segura, José Antonio Jacinto, Juan Mechán, Carlos Mundaca, Juan Mechán. Actualmente colaboran con la gestión de la capilla las señoras María Sahuma Guerrero y Mónica Reyes Guerrero, lideradas por la señora Leonor Doig. Es párroco el sacerdote José Antonio Jacinto Fiestas.

miércoles, 25 de mayo de 2016

Ciudadanos extranjeros (europeos, americanos y asiáticos) en Lambayeque de 1850 a 1930

Italianos parten rumbo a Perú

El Padrón de Extranjería (1850 – 1931) ubicado en el Archivo Regional de Lambayeque, muestra en dicho periodo registro del ingreso a nuestra región de 241 chinos, 175 japoneses, 23 españoles, 36 alemanes, 36 italianos, 30 norteamericanos, 21 franceses, 15 yugoslavos, 11 ingleses, 04 colombianos, 04 venezolanos, 11 ecuatorianos, 16 rumanos, 07 suizos, 03 escoceses, 02 húngaros, 03 chilenos, 02 austríacos, 01 holandés, 01 polaco, 02 griegos, 01 otomano (turco), 01 checoslovaco, 02 rusos, 01 argentino, 03 brasileños, 11 árabes (sirios), 02 palestinos, 02 israelitas y 02 de origen poco claro (aparece Furcor como lugar de origen). En total se registraron 669 extranjeros de los cuales solo 15 indicaron estar de tránsito por la región y el resto en calidad de residentes en el antiguo Departamento de Lambayeque.
El registro más antiguo es del año 1850 y corresponde al Sr. Federico L. Zetner de nacionalidad alemana, procedente de Darmstad, con 72 años de edad y residencia en Ferreñafe; mientras el registro más tardío, de 1931, corresponde al español Darío Riambro Porras de 34 años de edad, procedente de ecuador y de tránsito por nuestra región.
Judíos arribando al Puerto del Callao

Se puede observar la gran cantidad de ciudadanos extranjeros de diversas nacionalidades con apellidos judíos. También es posible notar que en reiteradas ocasiones, al parecer, el (los) registrador (es) escribió el apellido de acuerdo al sonido del mismo y no necesariamente coincide con la escritura correcta. Además, con respecto a los inmigrantes chinos se puede apreciar que algunos de ellos se registraron con los apellidos de quienes los contrataron para venir a nuestro país.
A continuación los apellidos de los ciudadanos extranjeros que ingresaron durante ese tiempo:
Españoles: Graner, Domingo y Gavaldá, Amengual, Miñana, Barlero, Pascual, Mateo, Larrusain, Ruiz, García, Garuomiola, Dalman, Calles, Parateha, René, Menéndez, Rua, Canteli, Novas, Martin, Sarricolus, Fernández, Riveros, Frontecille, Arana, Ballester, Riambro, Porras.
Alemanes: Bruning, Reimers, Feiler, Stechman, Zoeger, Bolzmann, Gerbitz, John, Sihrrastwann (sic), Zetner, Keinle, Du Bois, Feiler, Schiller, Kerkholl, Gotthelf, Fonn, Glass, Kuthn, Stumsberg, Gorbitz, Siebentritt, Kauffmann, Ressler, Sthepan, Wedd, Friedlauder, Liebert, Werner, Stemberg, Korner, Behr, Wolff, Kahler, Reinvers.
Árabes: Chereque, Abraham, Otto, Coopi.
Italianos: Campodónico, Maltese, Casaretto, Casinelli, Scarpati, Minetti, Batta, Brusso, Cilumbriello, Deville, Reynaud, Saresti, Valle, Bartolomeo, Buscoglia, Lossio, Aita, Bloise, Bianechi, Piccini, Fidanza, Lampo, Magliochetti, Catalani, Agostino, Chiarot, Favelly, Chirichigno, Canchido.
Sirios: Yunis, Cooper, Manmud, Saint, Terzolo.
Norteamericanos: Stephano, Nieva, Halwreth, Borbe, Pork, Holland, Blaesing, Mc Frue, Saldivar, Mc Henry, Chetter, Winaus, Winane, Westerlir, Myers, Lagerquist, Moore, Food, Harrigan, Losky, Hicklund, Browning, Casson, Schmetzen (Schmetgen), Keliu, Levy.
Franceses: Melillot, Mourit, Boyer, Duran, Dastugue, Paillos, Poirier, Saint Pastou, Brassie, Benson, Raymond, Graso, Richard, Morin.
Brasileños: Schavartz, Bastian (Bastican).
Yugoslavos: Cuglievan, Kuljevan, Lujac, Pecor, Wahtersdorfer (Waterdorfer), Basica, Peckar, Nekolin, Gjinanovic, Gjik, Miskulin, Percovich.
Ingleses: Fleming, Hunter, Esson, Miller, Levi, Milner, Marsh, Cambell.
Colombianos: Gómez, Forget, Yvezo, Churón.
Venezolanos: Mora, Guillén, Romero, Acosta.
Ecuatorianos: Zavala, Zevallos, Maestre, Peña, Cox, Cano, Armin, Miranda, Fernández.
Austríacos: Barbush, Patzelh.
Israelitas: Pollastro, Levy.
Argentino: Arzemo.
Rusos: Bruno, Yeffimos.
Rumanos: Eidelman, Ythoc, Eidelman, Brustein, Garenstein, Burnstein, Mechel, Ghelfgorti, Mekel, Fepu.
Suizos: Druyfun, Maibach, Rocoh, Baumann, Gygli, Borsinger, Battislga, Zusman, Borsinger. Holandeses: Weinat.
Polacos: Madejerrsky.
Griegos: Aragorico, Maimón.
Otomano: Aragonés.
Escocés: Nicokron, Schopield, Campbell.
Húngaros: Jovanovic.
Checoslovacos: Roller.
Chilenos: Letelier, López, Silva.
Palestinos: Schmerler.
Furcor: Bahar, Nrolhay.
Residentes Chinos

Con respecto a los inmigrantes chinos se puede apreciar que algunos de ellos se registraron con los apellidos de quienes los contrataron para venir a nuestro país a trabajar en las plantaciones de la costa; otros (pocos) se registraban de acuerdo al significado de su apellido en español. La vida de los ´culíes´ o ´coolies´ chinos fue muy sufrida en nuestro país. Según Spenser St. John, Cónsul británico en Lima en 1878, “…con mucha frecuencia los chinos eran cogidos con trampa en su propio país…se les amontonaba en barcos, en los que el aire viciado y la mala alimentación daba cuenta de ellos en gran porcentaje. En muchísimos barcos moría más de la mitad. Los contratos eran por ocho años a 4 dólares mensuales… (Los propietarios) a dichos hombres los consideraban como su propiedad y a menudo los trataban como esclavos, teniendo poder para azotarlos, encadenarlos y castigar de diversos modos a estas infortunadas criaturas…”. A pesar de esto, la Colonia China en nuestra región ha sabido sobreponerse a lo largo de la historia fruto del esfuerzo y perseverancia de sus miembros siendo innegables e innumerables los aportes de su inteligencia y cultura a nuestra región y país.
Chinos: Puseng, King, Fan, Lo, Kuong, Loo, Li, Lama, Pan, Dejo, Cruz, Mau, Lau, Hun, Chung, Losan, Kuan, Suchan, Chia, Fon, Kan, Fong, Zam, Kong, Chu, Alon, Polo, Kcamt, Azan, Chen, Chiu, Wong, Ching, Chong, Kon, Hnang, Acón, Kien, Sánchez, Hoja, Aja, San, Jon, Lodan, Asión, Wuenlloc, Choji, Tonfi, Kay, Alfón, Loy, Hin, Aguay, López, Lung, Kuam, Wú, Achí, Wuang León, Ling, Cahu, Men, Foro, Pue, Cuadra, Sen, Llen, Ahing, Yin, Fac, Leng, Yui, Seng, Fung, Shi, Loyi, Campos, Su, Ahon, Wosan, Pankan, Llan, Uno, Yong, Lia, Fú, Salina, Castillo, San, López, Wu, Wan, Pen, Kam, Kung, Wia, Lao, Liau, Loun, Kumai, Joo, Chuyon, Yan, Con, Wo, Chau.
Trabajadores Japoneses

Según refiere la Asociación Peruano Japonesa “la inmigración japonesa se inició en 1899 y los primeros grupos de japoneses que llegaron a nuestro país lo hicieron para trabajar en las haciendas de la costa peruana. Pero con el paso del tiempo, se trasladaron también a otras provincias del interior y empezaron a dedicarse al comercio, poniendo negocios como peluquerías, fondas, ferreterías, entre otros”. 

Los primeros japoneses en Lambayeque arribaron en 1899 a las haciendas de Cayaltí y Pomalca, contratados por sus propietarios los señores Antero Aspíllaga Barrera y los hermanos Segundo y Vicente Gutiérrez La Torre, respectivamente. La fuente indica que a Cayaltí llegaron 63 personas (50 provenientes de Hiroshima) y a Pomalca 100 (13 de Niigata, 50 de Yamaguchi y 37 de una zona no mencionada en el registro).
Japoneses: Chaschi, kimura, Yoshida, Toyomura, Sugihara, Otani, Ykchara (sic), Seo, Matguoka, Hashimoto, Kanamura, Matsuoka, Sato, Uchiyama, Macegawa, Ytaleashi, Meguro, Kitoshima, Sakamoto, Kusaka, Domen, Nagasawa, Hamasaki, Nakasukasa, Yanagui, Abe, Nakamura, Yahiro, Yeno, Tochiki, Ygari, Endo, Kamo, Matsuyama, Hagui, Watanabe, Huechiy, Kikuchi, Yoshimoto, Hashimoto, Matsui, Yamamoto, Tokomura, Kanna, Tagami, Furukama, Otaki, Sakakuchi, Tomari, Ono, Shimose, Kawahara, Weraki, Nakano, Surva, Yasuta, Kanohi, Kitayama, Kondo, Kikkawa, Okochi, Ychikawa, Murumachi, Nakayami, Takahashi, Uezaki, Sahai, Araki, Chama, Hayashida, Ueda, Yasumura, Kageyama, Sakuma, Minami, Miura, Ygare, Miyamoto,  Yoshimura, Ogata, Takayama, Ogukana, Yomada, Mayeda, Nakasaki, Yoshitaki, Tsukamoto, Norishigue, Kawamata, Kauno, Kamazhu, Ysoda, Kiyano, Yoshioka, Matsuzawa, Ywabuchi, Yoshija, Miyamura, Shimotakehara, Ageihi, Susuki, Kame, Wakamatsu, Otsu, Nitta, Nikishaka, Tateshita, Hiroshima, Morimoto, Suda, Seino, Kogeyama, Kitazima, Yamada, Mizokami,  Ogawa, Gamauchi, Sumota, Higoi, Kanohara, Yamaguchi, Gushikono, Nagano, Higa.

martes, 17 de mayo de 2016

Catálogo de leyes sin número sobre Lambayeque 1822 - 1904

Casona Cúneo 

Don Bernardo de Monteagudo, firma el 15 de junio de 1822 el decreto que dispone la expedición del título provisional de ciudad al partido de Lambayeque con el renombre de Benemérita y Generosa. El decreto incluyo el establecimiento de una escuela de primeras letras.
El 18 de diciembre de 1822, la Junta Gubernativa del Perú decreta confirmar el decreto que eleva a ciudad al partido de Lambayeque, considerando “…los auxilios que prestó al ejército libertador antes y después  de su ingreso a esta capital, y al ejemplo que dio a los demás pueblos de aquel departamento en la proclamación de la independencia…”
Un decreto de octubre de 1826 dispone “…aplicar las entradas pertenecientes a los arruinados conventos de Saña al establecimiento de un colegio de ciencias y artes en la ciudad de Lambayeque…”
El 11 de noviembre de 1851, el congreso reconsideró una resolución dada en 1849 y decidió pagar una mesada de 400 pesos por una deuda de 11 800 pesos contraída desde 1832 por parte del estado peruano.
Con un decreto del 31 de mayo 1859, se dispone se forme un cauce al Río Lambayeque. Para la obra se destinó 11 252 pesos; las obras estarían a cargo del Ing. Alfonso Montferier.
El 15 de abril de 1861, el Congreso de la República “… atendiendo a que la Iglesia de Lambayeque se encuentra en estado de ruina y a que una parte considerable de sus bienes fue tomada para sostener la guerra de la independencia nacional...” dispuso la dación de 8 000 pesos para las obras de reconstrucción, encargando a una junta de tres vecinos notables y el párroco la administración de los recursos.
Mediante ley de 21 de enero de 1863, se estableció en Lambayeque un colegio de instrucción media “…igual al de Chiclayo, en el plan de estudios y en la dotación…”.
Mediante decreto del 07 de enero de 1872, el presidente José Balta erige el Departamento de Lambayeque indicando que “el presente decreto comenzará a surtir todos sus efectos tan luego como merezca la aprobación del cuerpo legislativo a cuyo fin será sometido al próximo congreso…” esto se produciría en 1874.
El 05 de febrero de 1875, el presidente Manuel Pardo promulga la ley que designa el personal para la Prefectura del recientemente creado Departamento de Lambayeque. Los empleados serían: Prefecto, secretario, oficial archivero, amanuense, ayudante capitán, subteniente y portero – conductor.
Mediante ley del 05 de febrero de 1875 el presidente Manuel Pardo erigió a la categoría del pueblo el caserío de Chóchope, en el distrito de Motupe. Lo hizo considerando que “el número de habitantes del caserío de Chóchope hace necesaria la existencia de una autoridad que mantenga el orden…”
Con una Resolución Legislativa, el 31 de enero de 1877 se aprueba autorizar estudios y elaborar presupuestos para las siguientes obras: “… la canalización del Río de la leche… la construcción de un canal que conduzca las aguas de la laguna Tembladera hasta el pueblo de Salas…la desviación de las aguas de las quebradas de Tambillo y Quinuas hasta el pueblo de Motupe…la construcción de represas en las quebradas de Porcullo y Sincape, para acopiar las aguas y conducirlas hasta el paraje llamado el Cascajal y las llanuras del distrito de Olmos…”.
La Resolución legislativa del 10 de octubre de 1886, concede a Don Nicanor Carmona permiso para continuar en el cargo de Cónsul de la República Argentina en Lambayeque.
El 22 de octubre de 1891, una Resolución Legislativa dispone el despacho libre de derecho fiscal a las piezas que forman la cúpula de la Iglesia de Lambayeque “…encargada por los vecinos de esa ciudad…”.
La resolución Legislativa del 20 de octubre de 1893, autoriza al ciudadano Antonio Delgado y Delgado para desempeñar el cargo de Cónsul del Imperio Chino en Lambayeque.
Una ley del 17 de noviembre de 1894 aprueba dividir el distrito de Mochumí, creando de esta manera el de Túcume conformado por Túcume e Illimo. Se indica “… Túcume será capital…los límites del nuevo distrito de Túcume son: por el norte el lindero de Pacora, por el sur el de Mochumí, por el oeste el de Mórrope y por el este los linderos actuales de la Hacienda Batan Grande…”.
Mediante ley del 31 de diciembre de 1894, firmada por el presidente Andrés Avelino Cáceres, se asigna una partida del presupuesto del Departamento para la contratación de un médico “…para el servicio sanitario de la provincia de Lambayeque…”.
El 19 de setiembre de 1898 se dicta la ley que eleva a la categoría de Villa a los pueblos de Jayanca y Motupe. La ley fue firmada por el presidente Nicolás de Piérola.
El 14 de noviembre de 1898 el Congreso resolvió declarar “… libre de todo derecho fiscal la importación del altar mayor que los vecinos de Lambayeque han mandado a construir en los estados Unidos para la Iglesia Matriz de la referida ciudad…”
El 14 de octubre de 1899, el Congreso emite una Resolución Legislativa aprobando una partida económica para la refacción del cauce y del desaguadero del Río Lambayeque.
Mediante Resolución Legislativa del 27 de noviembre de 1902, el Congreso concede permiso al ciudadano Manuel Pastor para aceptar el cargo de Cónsul de la República del Ecuador en el Departamento de Lambayeque.
Don Manuel Candamo, presidente del Perú, con fecha 09 de noviembre de 1903 firma la ley que dispone la creación de un juzgado de 1ra instancia de causas criminales en el Departamento.

El 13 de enero de 1904, el presidente Manuel Candamo promulgó una ley creando en el departamento un impuesto sobre el consumo de licores para obtener recursos destinados a las obras de represa y encauce de los ríos del Departamento. El impuesto fue igual al de mojonazgo (impuesto a la venta de vino) que se cobraba en el resto del país. 

lunes, 16 de mayo de 2016

Catálogo de leyes sin número sobre Chiclayo del siglo XIX a inicios del XX (1820 - 1904)

Calle Antigua de Chiclayo, hoy Juan Cuglievan.
Foto de Ricardo Silva Peralta en "Antiguas Fotos de Chiclayo"

La información que brindo a continuación considera la contenida en el archivo de leyes y Decretos sin número, del Congreso de la República, emitidos entre 1820 y 1904. en trabajos posteriores mostraré las de la Provincia de Lambayeque.
El 12 de noviembre de 1827, el presidente José de la Mar firma una ley que indica “el pueblo de Chiclayo perteneciente a la provincia de Lambayeque del Departamento de La libertad, se denominará Villa…”.
El 17 de enero de 1833, los Sres. Manuel Tellería y José María de Pando presidentes de las cámaras de Senadores y Diputados respectivamente, firman la ley que establece “un colegio en la Villa de Chiclayo con la renta de los conventos supresos de Saña…”.
El 20 de abril de 1833, el Sr. José María Corvacho, Ministro de Gobierno, emite un Decreto respaldando el pedido del gobernador eclesiástico de Trujillo y separa el curato de Eten del curato de Chiclayo. En el Decreto se lee “…nada más útil para adelantar a los pueblos en el orden moral y político que el que formen parroquias…ojalá fuera posible colocar un cura propio aun en la aldea más pequeña…”.
Según nuestra historia, el 18 de abril de 1835, el presidente Felipe Santiago Salaverry eleva a la Villa de Chiclayo a la categoría de ciudad con el título de “heróica” y crea, en el acto, la Provincia de Chiclayo; sin embargo, este dato no aparece en el archivo del Congreso de la República. En dicho archivo se registra que el 20 de marzo de 1839, el presidente Agustín Gamarra crea la provincia de Chiclayo conformada por “…los pueblos de Chiclayo, Picsi, Reque, Monsefú, Eten, Saña, Pueblo Nuevo, Guadalupe, Jequetepeque, Chepén y San Pedro…” esto para contribuir al “…reposo público y el mejor recaudo de las contribuciones…”.
Un decreto del 22 de diciembre de 1846 ordena que el juez de aguas de Lambayeque lo sea también de Chiclayo.
El 10 de enero de 1850, los Sres. Antonio de la Fuente y Bartolomé Herrera, presidentes de las cámaras de Senadores y Diputados respectivamente, firman la ley que faculta al gobierno que se “… asigne en el presupuesto general la cantidad de mil seiscientos pesos para la dotación de dos cátedras…” en el colegio San José de Chiclayo.
La ley del 18 de diciembre de 1851 considera “que es de absoluta necesidad la creación de un hospital en la ciudad de Chiclayo…” se determina que “…se destina el local actualmente denominado ´Fábrica´… serán fondos de dicho hospital el tomín de la Provincia de Chiclayo (impuesto pagado por los indios para el sostenimiento de los hospitales) y demás rentas de la beneficencia…”.
El 08 de noviembre de 1853, el Congreso erige un juzgado de primera instancia en Chiclayo “… por no ser suficiente el que existe ha decidido crear uno en la provincia de Chiclayo” firmaron la ley el presidente de la Cámara de Senadores Sr. Antonio de La Fuente y el presidente de la Cámara de Diputados Sr. Francisco Forcelledo.
Mediante Decreto del 12 de abril de 1856, “careciendo en el día las provincias de Chiclayo y Lambayeque de un reglamento que determine el modo de distribuir las aguas que riegan las haciendas y chacras de dichas provincias…” se autoriza que dicha distribución se haga por el reglamento de aguas formado por el Dean Saavedra que regía, en esa fecha, en Trujillo.
El 29 de octubre de 1857, el Consejo de Ministros otorga mediante decreto la autorización a la Compañía Solf para la utilización de maquinaria novedosa para limpiar y conservar arroz “… entendiéndose que este privilegio no perjudica el derecho que tienen los agricultores… de continuar limpiándolo por el método que han utilizado hasta ahora…”
Por Decreto del 11 de mayo de 1859, se destina una partida presupuestal para la compra de los útiles necesarios para la apertura del colegio de Chiclayo “… cuyo acto anhela aquel vecindario…” se determina “…que se establezcan tres cátedras, una de matemáticas puras y geografía, otra de filosofía e historia y la tercera de latín, gramática castellana y religión…”; se nombra como Rector al Sr. Clemente Peralta, Vicerrector al Sr. Juan Quevedo y Secretario al Sr. Martín Hernández.
El 23 de mayo de 1861, el presidente Ramón Castilla, firma la ley que asigna los recursos para la refacción del claustro del convento supreso de San Francisco de Chiclayo donde se alojó el colegio de ciencias (San José). Se aumenta el sueldo al Rector del colegio y se crean las cátedras de francés e inglés.
El 29 de setiembre de 1866, el presidente Mariano I. Prado, firma el decreto que organiza el Colegio Nacional de Chiclayo. Se establecen las secciones de la institución, modalidad de contratación de profesores, asignaturas, entre otros.
Mediante decreto del 21 de enero de 1868 se ordena que se haga extensivo al pueblo de Chiclayo los beneficios del decreto emitido en Arequipa el mismo año “…relativo a la indemnización de los daños causados en aquella ciudad con motivo de la lucha allí sostenida…” refiriendo a la Revolución encabezada por el coronel José Balta. Firma el vicepresidente Pedro Diez Canseco.
El 27 de noviembre de 1874 el Congreso acuerda la creación del Departamento de Lambayeque compuesto por las provincias de Chiclayo y Lambayeque. El 01 de diciembre, el vicepresidente del Perú Dr. Manuel Costas, en ausencia del presidente Manuel Pardo, firma la ley de creación que, además, reconoce a Chiclayo como capital del Departamento.
Una ley del 27 de diciembre de 1887 firmada por Andrés A. Cáceres, establece como rentas propias del colegio San José “5 centavos por cada 138 Kg. De arroz en cáscara que se introduzcan a los molinos… 5 centavos por cada saco de 87 Kg. Que se importe por los puertos de Pimentel y Eten… 25 centavos por cada 314 Kg. De maíz que se consuma en los pueblos de dicho Departamento…”los ingresos fueron administrados por la Junta Económica del colegio.
Mediante ley del 26 de octubre de 1888, el presidente Andrés A. Cáceres, eleva a la categoría de ciudad al pueblo de Monsefú y a la de Villa al pueblo de Eten.
El presidente Remigio Morales Bermúdez, con fecha 25 de noviembre de 1892, emite la ley destinando por una vez la cantidad de seis mil soles para los hospitales de Lambayeque y Chiclayo administrados por las sociedades de beneficencia. Dicho monto sería repartido en partes iguales.
El 18 de noviembre de 1893, el presidente Remigio Morales Bermudez firma la ley creando un impuesto de “16 centavos de sol sobre cada 46 kilos de harina que se consuma en las provincias de Lambayeque y Chiclayo…” para el “…sostenimiento de sus respectivos hospitales a las sociedades de beneficencia de dichas provincias…dos terceras partes para Chiclayo y una tercera parte para Lambayeque…”
El 08 de noviembre de 1894 el Congreso emite la ley creando el impuesto de “agentes muestrarios” con la finalidad de “…crear fondos para facilitar el incremento de la instrucción primaria de la provincia de Chiclayo…” el impuesto sería cobrado por la municipalidad y oscilaría entre 5 y 50 soles “…según la calidad de los artículos que negocien y la importancia de las ventas que efectúen…”, firman César Canevaro, presidente de la Cámara de Senadores y Manuel María del Valle, presidente de la Cámara de Diputados.
Mediante ley del 18 de diciembre de 1895 se consideró “…urgente asegurar la subsistencia del colegio nacional de San José de Chiclayo…” y se creó “un impuesto de 5 centavos por cada botija de chicha que se elabore en el Departamento de Lambayeque…” el impuesto sería recaudado por las municipalidades y entregado a la Junta económica del colegio. Firmó la ley el Sr. Nicolás de Piérola.
El 10 de agosto de 1898, los Sres. Manuel Candamo y Carlos de Piérola presidentes de las cámaras de Senadores y Diputados respectivamente, crean un juzgado privativo de aguas para las provincias de Chiclayo y Lambayeque en atención a “que el desarrollo de la agricultura en el Departamento de Lambayeque así lo exige…”.
El 26 de setiembre de 1901, el presidente Eduardo López de Romaña, decreta “concédase al colegio de educandas Nuestra de la Concepción, de la ciudad de Chiclayo el uso del local del estado que actualmente ocupa, sin más obligación que la de mantener gratuitamente a favor de las provincias del departamento, un número de becas internas y externas, equivalente al alquiler del local, a juicio de la H. Junta Departamental…” dicho local se ubica actualmente en la intersección de la Av. Saenz Peña y la Calle San José, antiguo Palacio de Justicia.

El 30 de setiembre de 1901, el presidente del Congreso Sr. Mariano H. Cornejo promulga la ley que otorga 200 libras de presupuesto para los estudios que permitan proveer de agua potable a la ciudad de Chiclayo. 

miércoles, 11 de mayo de 2016

Don Pedro Ruiz Bravo, Periodista Insigne

Portada del Diario limeño "El Tiempo" de 1918
El presente artículo trata de un personaje hasta hoy desconocido, parecido por homónimo del aquel gran inventor etenano. Nuestro personaje de hoy destacó por sus dotes de comunicador.
Insigne y controversial representante del periodismo político de la segunda década del siglo XX, nació en Chiclayo en 1884. Siendo un niño, se traslada a la ciudad de Lima junto a su familia e hizo sus primeros estudios en el  Liceo Científico y en la Escuela Técnica de Comercio de dicha capital. En 1902, viajó a Bolivia y Chile.
Según J. Pedro Paz Soldán “Formó parte de la redacción de La Nación de La Paz y colaboró en otros diarios de aquella capital.  En 1903, regresó a Lima y fue uno de los fundadores de La Prensa en 1904. En ese diario permaneció hasta 1909 en que el gobierno de Leguía hizo asaltar La Prensa y encarceló a sus redactores y empleados. Al salir de la Penitenciaría, fundó con Carlos Guzmán y Vera El Imparcial, diario de oposición que vivió un año. Después ingresó de nuevo a la redacción de La Prensa, hasta 1915” (Paz Soldán, 1917).
“Elegido diputado por Antabamba, tomó parte en acalorados debates sobre cuestiones militares, interpelando dos veces a los ministros de guerra y gobierno” (Ibídem). En 1916, fundó el diario "El Tiempo", según Juan Gargurevich, para “preparar la caída de José Pardo y las condiciones para el retorno al poder de Augusto B. Leguía… en El Tiempo se reunieron periodistas como Pedro Ruiz Bravo, Guzmán y Vera, Falcón y Mariátegui, Luis Ulloa Cisneros, Moisés Vargas Marzal, César Alzamora, Albert Secada, Humberto del Águila y otros menos conocidos”. En cuanto Pedro Ruiz Bravo anunció su decisión de editar un nuevo periódico, ofreció a su amigo José Carlos Mariátegui el puesto de cronista parlamentario y comentarista, puesto que aceptó. Tiempo después, el 25 de junio de 1918, Mariátegui, decepcionado por lo que consideró una traición, se apartaría de “El Tiempo” a través de una carta dirigida a Ruiz Bravo en la que indica “El comportamiento un tanto reticente y otro tanto desleal de Ud. ante la agresión de que he sido objeto en las oficinas de El Tiempo, violadas y vejadas por el tumultuoso grupo de oficiales del ejército que la perpetró, me hace sentir el deber imperioso de apartarme de este diario al cual me trajeron, con la complicidad dolorosa de mi abulia y mi inquietud, solicitaciones de usted… (Mi) Cooperación, señor Ruiz Bravo, que para mí no ha representado sino la esterilización baldía de dos años de mi juventud y mi contaminación con pecados, huachaferías y errores cuya repulsa he tenido que sepultar en el fondo de mi alma.” (Carta de Mariátegui a Ruiz Bravo en Colección “Correspondencia” Tomo I y II - 1984).
El mismo Gargurevich señala que “el carácter opositor al civilismo le costó al diario de Pedro Ruiz Bravo varias clausuras, entre ellas, la de enero de 1919. Pero cuando se precipitó la caída del gobierno de Pardo, este periódico asumió una posición favorable a Augusto B. Leguía y con ello quedó arraigado al periodismo típico de lo que Mariátegui llamaba la ´política criolla´. La opción política de Ruiz Bravo a favor de Leguía provocó diferencias con los redactores jóvenes que pretendían desacreditar no solo al civilismo sino a todo el sistema político” (Gargurevich, 20006 - Citado Fernanda Beigel).
Es de resaltar la posición de Pedro Ruiz Bravo respecto de la enseñanza de la historia en aquellos años. En uno de sus más célebres artículos, el 28 de setiembre de 1919, afirmó: "tiene razón El Tiempo al lamentarse de que las generaciones pasadas hayan sido engañadas y que las presentes y futuras, a sabiendas, también lo sean. En el Perú el que ha sufrido y sufre terriblemente la inconciencia de algunos escritores e historiadores que, desde las redacciones de los periódicos y de sus gabinetes de trabajo, han cometido la ruin tarea de embrutecer a tres generaciones de peruanos… hasta hoy no se ha escrito la verdadera historia del Perú…”

En la colección de folletos de la Biblioteca Central de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, hay uno denominado “Candidatura popular e independiente de Pedro Ruiz Bravo, a una representación por Lima: opiniones y documentos que prestigian a este patriota ciudadano y justifican la conveniencia de llevarlo al Congreso Constituyente de 1931” (1931). Fue oficial de Academia de Francia y miembro de la Sociedad Geográfica. Falleció en Lima el año 1960.

Don Camilo Vallejos Zuñe

Mapa del Perú de 1913 elaborado
 por el chiclayano Camilo Vallejos Zuñe

Nació en Chiclayo el 16 de febrero de 1863. Hijo de José Camilo Vallejos Gamarra (1823 – 1890) y Micaela Zuñe. Fue el tercer hijo de esta relación de la que, además, nacieron sus hermanos Petrona y Mateo. Adicionalmente, tuvo nueve hermanos producto de relaciones anteriores de su padre.
Según Juan Pedro Paz Soldán, “Hizo sus estudios en el colegio Nacional de San Luis de Chiclayo. Desde sus primeas años manifestó vocación por la carrera de Ingeniero, dedicándose con predilección al dibujo cartográfico. En 1877, sus padres lo dedicaron a la carrera del comercio, para la cual, además, tenía inclinación y aptitudes. A la edad de 19 años, defendió a la patria en la guerra con Chile, abandonando el buen porvenir que con su seriedad y honradez iba labrándose en el comercio, en la casa francesa de don Luis Laborie. Laborie le ofreció asociarlo en sus negocios para que no saliese a la guerra, puesto que todo estaba perdido con la toma de Lima y ocupación de Chiclayo, y Vallejos le manifestó que estaba muy joven para hacer fortuna y que primero era su patria.” (Paz Soldán, 1917)
Sobre su participación en la Guerra con Chile, Paz Soldán afirma “… (Vallejos) sale solo (de Chiclayo), burlando el espionaje chileno. En Chongoyape, forma con 50 hombres más, la base de unos 200 guerrilleros, que tanto dieron que hacer al enemigo, en el norte de la república. Se bate con los chilenos en Motupe y Guadalupe… el coronel Robles, chileno, jefe del Regimiento Lautaro, y de la plaza de Chiclayo, que conocía personalmente a Vallejos, ordenaba siempre a los diversos jefes de las comisiones… que a Vallejos, lo tomasen vivo, pues deseaba hacerlo confesar por medio del martirio, si su jefe comercial lo había mandado tomar las armas contra Chile; creencia equivocada en que estaba Robles, sin comprender el ardiente patriotismo del joven Vallejos… asaltó en Pátapo el ferrocarril de Eten y en las puertas de Chiclayo ataca un pelotón de caballería chilena y la puso en fuga hasta el interior de la ciudad…La ruda vida de campaña de tres meses puso en peligro la delicada salud de Vallejos, quien se retiró a repararla por mandato médico. Restablecido, volvió al comercio cuando los chilenos habían desocupado la plaza, firmada la paz” (Ibídem).
Vallejos, según “Galería de Lambayecanos Ilustres” (1962) “trabajó en las prefecturas de Lambayeque, Cajamarca e Ica; también en las subprefecturas de Pisco, Trujillo y Piura” añade Paz Soldán que las autoridades para quienes trabajó “hicieron de Vallejos honrosas recomendaciones por su laboriosidad y rectitud”.

En 1896, ingresó a la Sociedad Geográfica de Lima donde se desempañó como cartógrafo hasta 1916. Trabajó junto a los presidentes de esta institución Luis Carranza y Pablo Patrón; Contralmirante Carvajal, el escritor Ricardo Palma y los Ingenieros Eulogio Delgado y José Balta. Entre los principales trabajos de Vallejos, se encuentran: Un mapa general de las Salinas del Perú, año de 1897. Un mapa político, y otro minero del Perú, para la exposición Internacional de París, año 1900. En 1901, formó parte de la Comisión exploradora del Istmo de Fitzcarrald. En 1906, trazó un mapa para las Escuelas públicas y otro para propaganda. En 1907, publicó en ´El Comercio' sus estudios sobre la conveniencia de un ferrocarril entre Lima y Buenos Aires. En 1908, trazó varios mapas de ferrocarriles y telégrafos para la Exposición Internacional de San Francisco de California. En 1909; publicó en la Revista The Engineering and minning Journal de Nueva York un mapa ilustrativo de los mantos carboníferos para llamar capitales al país. En 1910, publicó en la Revista Economista Peruano, las vías de comunicación entre el Callao y Para (Brasil), incluyendo mapas e informes Sobre carbón de piedra, petróleo y gomales del Perú. En 1911, publicó en ´El Diario´ las monografías de Tumbes, Piura, Ayabaca, Paita, Huancabamba y Pacasmayo. En 1912, trazó un mapa popular del Perú y un Mapa General de los depósitos de guano y zonas agrícolas del Perú. En 1914, publicó en el Magazine Atlanta ele Buenos Aires, una descripción general del Perú. En 1915 trazó un mapa de la costa del Perú para la Escuela Nava y publicó en ´La Prensa´ las monografías de las provincias de Chancay, Chiclayo, Trujillo, Cañete y Chincha, con sus mapas ilustrativos. En 1916, trazó un nuevo mapa de los ferrocarriles del Perú. Ese mismo año trazó dos grandes mapas del Perú: uno físico, y otro político, ambos mandados trazar por el gobierno del señor Pardo. “Después de nueve lustros de servicios prestados a la patria y ya jubilado, se retiró a la vida tranquila del hogar; se radicó en Magdalena del Mar y ahí lo encontró la muerte, a los 85 años de edad. Era el año de 1945” (“Galería de Lambayecanos Ilustres”,1962)

miércoles, 4 de mayo de 2016

Los hermanos Gal´Lino Domenack


De la familia conformada por Teniente de Bersaglieri, señor José Gal´lino Doménico, natural de Turín (Italia) y de doña Elvira Domenack Pérez, natural de Chiclayo, de ascendencia española; nacieron Napoleón, Humberto y Víctor Gal´Lino Domenack. Motupanos que enorgullecen a nuestra región, se dedicaron con excelencia a distintas actividades y, sin embargo, lograron ubicar sus nombres en las más luminosas páginas de nuestra historia. A continuación una breve reseña de los tres.
El señor Napoleón Gal´lino Domenack, fue según Teodoro Rivero uno de los más importantes historiadores lambayecanos de inicios y mediados del siglo XX junto a Jorge Zevallos Quiñones y Miguel Onetto García (Rivero, 1976). Según la Revista Firruñap (1967) dirigida por el señor Héctor Carmona, Napoleón Gal´lino Domenack, “nació en Motupe, Lambayeque, el 1 de junio de 1912... Hizo sus primeros estudios en el colegio italiano ´Umberto I´ y secundarios en el colegio nacional ´Nuestra Señora de Guadalupe´. Cursó estudios de ciencias en la universidad de ´La libertad´ de Trujillo, de letras en la Pontificia Universidad Católica del Perú y de derecho en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos de Lima… miembro del Centro de estudios Histórico Militares del Perú, del Instituto Peruano de Investigaciones y Divulgaciones Históricas, del Instituto de Cultura Hispánica, de la Sociedad Numismática del Perú, del Instituto Libertador Ramón Castilla, del Instituto Sanmartiniano del Perú y miembro de número del Instituto Documenta de Madrid... Sus trabajos históricos fueron publicados en la Revista ´Divulgaciones Históricas´, ´Boletín bibliográfico de la Biblioteca central de la UNMSM´, Revista Fraterna. Además, en los diarios ´El Comercio´, ´La Prensa´ y ´La Crónica´ de Lima; ´El Deber´ de Arequipa, ´La Industria´ de Chiclayo, ´El Tiempo´ de Piura y ´ABC´ de Madrid” (Firruñap, 1967). Rivero afirmó “tiene en preparación ´Origen y Reforma del Tribunal Mayor de Cuentas´, ´Armerías nobiliarias de Lambayeque´, ´Origen de la devoción de la Santa Cruz de Chalpón´ y una biografía de Nicolás de Ayllón, el Santo Indio del Perú” (Rivero, 1976) debo indicar no haber leído libros de nuestro personaje, sí he tenido acceso al excelente ensayo histórico sobre los Cañaris, documento fundamental para la comprensión de los aportes de dicho grupo étnico.
Sobre Humberto y Víctor Gal´Lino, Rivero afirma “es justo recordar la proeza cumplida por los motupanos Humberto y Víctor Gal´Lino, quienes el 29 de octubre de 1939 cubrieron en un bimotor ´Barkey Grow´la ruta New York – Lima, en vuelo directo sin precedentes. La nave comprada por colecta pública al capitán rumano Alex Panana, fue bautizada por los raidistas con el nombre ´Cruz de Chalpón´ en regionalista homenaje al lar nativo. Desviados de su ruta por tormentas en el Mar Caribe, arribaron a la Isla Puná con el tanque casi vacío. Habían tenido 26 horas de vuelo, con lo cual batían record de distancia, sin escalas: 6 500 Km. Humberto, que perteneció a la primera promoción ¨Jorge Chávez´de la FAP, alcanzó grado de comandante; su hermano Víctor el de capitán…” (Rivero, 1976) por error, Rivero señala 29 de octubre de 1939, cuando la fecha real fue 23 de marzo de 1939.
Humberto Gal´Lino Domenack

A los anteriores datos agrego que Humberto y Víctor realizaron su raid como parte del “Escuadrón Grumman” liderado por Humberto. El viaje hacia el Perú se inició 23 de marzo de 1939 desde el aeropuerto de Floyd Benett con rumbo a Charleston, destino al que llegaron después de 4 horas y media. Siguieron a Miami, Belice, Managua, Panamá, Chiclayo y Lima, con una breve escala en Ancón. Fueron recibidos en el aeropuerto de Limatambo, por el Presidente de la República, Sr. Oscar R. Benavides y una multitud de personas.

Nave Cruz de Chalpón piloteada por los hermanos
Gal´Lino
Los nombres de los hermanos Gal´Lino no deben ser olvidados. En su momento, trabajaron con excelencia en sus respectivas actividades y, en todo tiempo y lugar, mostraron su orgullo por la tierra que los vio nacer. Ese es su legado, la satisfacción del trabajo bien realizado y la gratitud respecto a la tierra de sus orígenes, gesto que en la realidad actual globalizada es cada vez menos frecuente.


martes, 26 de abril de 2016

La Monografía “Galería de Lambayecanos Ilustres” de 1966

Carátula de la Obra "Galería de Lambayecanos Ilustres"

En julio de 1966, año declarado por el gobierno como “Año de los vencedores del Dos de Mayo”, se presentó el trabajo monográfico “Galería de Lambayecanos Ilustres”, editado por el Instituto Experimental de Educación Primaria N° 17, ubicado por aquel año en la cuadra 15 de la calle Leoncio Prado de la Urbanización Campodónico en el actual local de la I.E N° 11001 de la cual soy exalumno.

Según la página de créditos, los autores son “(el) personal del instituto…”profesores: Luis Ricardo Pongo Machado, Raúl Ramírez Soto, Delia Said Villanueva de Castillo, Rosa Imelda Albujar Flores, Moraima Isabel Guerrero Iturregui, Rosa Amelia Sánchez Araujo, Nelly Violeta Mayorga Vélez Incháustegui, María Esther Riquero Yacarini, Alida Franco Cabrales, Blanca Soledad Quevedo Barturén, Raquel Villalobos Segura, Rosa Díaz Becerra, Jaime Enrique Yeckle Alvarado y Violeta Mendoza Zarria; también se consigna como colaborador a Renán Sánchez Urrelo. Por versión del maestro y escritor Raúl Ramírez Soto he sido informado que asesoró la monografía el Prof. Antonio Serrepe Asencio. El trabajo, según los autores, se hizo “cada quien hurgando en viejos periódicos, en trabajos monográficos, en libros olvidados; para compendiar, en un solo tomo, las biografías de los personajes e este singular grupo de lambayecanos ilustres y poder presentar este sencillo aporte que, indudablemente, permitirá el mejor conocimiento de quienes, con su vida y obra ejemplares, hicieron gran aporte de ña historia del Departamento”. El texto de 55 páginas fue prologado por el maestro Raúl Tupayachi Segura y presentado por Don Jorge Wester Barrera, Decano de la Facultad de Educación de la Universidad Nacional “Pedro Ruiz Gallo”.

Además de los datos biográficos de personajes lambayecanos como Nicolás de Ayllón, José Leguía y Meléndez o Diego ferré Sosa, entre otros; el trabajo monográfico presente datos históricos cortos que hoy me animo a presentar de manera textual:
Sobre San José: Con el progreso vino la decadencia de San José como puerto. San José fue durante mucho tiempo el puerto principal del departamento y también de la región. Cuando se abrió el tráfico marítimo en Puerto Eten, instalándose el ferrocarril a Ferreñafe y a las haciendas Pucalá y Cayaltí, la importancia de San José como puerto quedó reducida a una humilde caleta de pescadores. Luego vino la habilitación de Pimentel, decretando definitivamente la ruina del lugar preferido de la nobleza de Lambayeque que solía llegar a San José especialmente durante la época de verano (p. 4)
Balsa en el litoral lambayecano - Siglo XIX
Fotografía de Enrique Bruning
Sobre Don Vicente de la Vega: Distinguido filántropo lambayecano, nació en Chiclayo en el siglo pasado (XIX); fue prototipo entre aquellos hombres que no conocen de egoísmo; pese a la fortuna económica de que era dueño era sumamente modesto y sencillo. En cierta ocasión, cuando llegaron por primera vez al Perú las máquinas de coser con mecanismo de cadena, obsequió dos docenas de ellas a la gente más humilde. La Beneficencia Pública de Chiclayo recibió en donación de su parte una de las fincas de su propiedad en la que hoy es la calle Elías Aguirre; también esta institución recibió su obsequio de varias casas en la calle San Pedro, llamada hoy en memoria de nuestro personaje, Vicente de la Vega (p.5)
Sobre el Parque principal de Chiclayo: el 30 de agosto de 1916 se efectuó la ceremonia de inauguración de nuestro parque principal. La iniciativa se debió al filántropo trujillano Don Víctor Larco Herrera, que contribuyó con su dinero a los trabajos preliminares, en la visita que hiciera a esta ciudad, en diciembre de 1915. La obra fue terminada por la Junta Departamental que presidía Don Francisco Cúneo Salazar, con el auxilio inmediato de los hacendados del valle y de los buenos vecinos de Chiclayo. Se dio inicio a los trabajos el 20 de marzo de 1916; no pudiendo inaugurarse el 28 de julio de ese año por no haberse terminado. A la ceremonia concurrieron las autoridades políticas, judiciales, municipales, dos bandas de músicos y una numerosa concurrencia. El párroco Cipriano Casimir y dos mercedarios franceses hicieron la bendición. El Prefecto de esa época, Sr. César Bustamante, apadrinó la obra en representación del Sr. Presidente de la República. La madrina fue la Sra. Susana Vásquez de Larco Herrera, quien por estar residiendo en Buenos Aires, no pudo delegar poderes a persona ninguna de la localidad (p.13)
Sobre Monsefú: Según las crónicas del viajero Don Simón Pérez de Torres, la ciudad de Monsefú no siempre ha estado ubicada en el lugar donde hoy se encuentra. En el año 1586 la población se vio obligada a abandonar las cercanías de Alicán por haberse presentado una epidemia de peste negra que diezmó al pueblo. Los monsefuanos abandonaron sus casas llenas de muertos para refugiarse en el lugar que les ofrecía agua y vegetación. En el año 1570 el Virrey Don Francisco de Toledo mandó a Don Luis Morales de Figueroa para que matricule las Encomiendas a la provincia de Trujillo o Corregimiento de Zaña. Tenía una población de 716 habitantes que pagaban un tributo de 2662 pesos, de ellos un quinto era para el Rey Felipe II (p.14)
Sobre Don Juan Balcázar: El primer alcalde provincial de Chiclayo fue Don Juan Manuel Balcázar. Era el año 1835, época en que se instauró la provincia. El Sr. Balcázar era un hombre acaudalado. Mayores detalles se pierden en la nebulosa del pasado. No hay archivo municipal por haberlo quemado los chilenos. Solamente se conoce con precisión que en el año 1869 fue alcalde de Chiclayo Don Juan Manuel Iturregui (p. 15)
Sobre la calle Teatro de Chiclayo: Fue el coronel Ortiz quien hizo la calle del teatro. Chiclayo, en su condición de provincia, pertenecía a Trujillo. Cuando el coronel José Leonardo Ortiz era la figura principal de la ciudad, llegó a Chiclayo el Prefecto de La libertad, General Suárez y se hospedó en casa de nuestro prócer. Ortiz se desvivía por Chiclayo, no dejaba pasar oportunidad para aprovecharla en beneficio de su pueblo. La calle del teatro no existía, era una enorme huerta. El coronel habló con el general Suárez sobre la necesidad de abrir una calle precisamente por la portada de esa huerta, con el fin de dar comunicación a las construcciones que ya existían, en lo que hoy es la calle Cuglievan y, por el otro lado, la calle Balta. Autorizado el Sr. Ortiz para proceder con las exigencias de la población, en un gran comicio, habló así a los habitantes de Chiclayo: “chiclayanos, os comunico que de acuerdo con la autorización otorgada por el Prefecto, General Suárez, nuestro ilustre huésped, se va abrir esta calle. Discúlpenme mis amigos los indígenas que no les ceda sitio para sus ramaditas, porque necesitamos que esta calle esté terminada dentro de un plazo de siete meses (p. 20)
Sobre la Plazuela Elías Aguirre: Se inauguró el 28 de julio de 1897. El acto fue uno de los puntos principales considerados del el programa que la municipalidad de Chiclayo había elaborado con ocasión de celebrarse las fiestas patrias (p.20)

Sobre las Escuelas Municipales de Chiclayo de 1884: Bajo los auspicios del entonces alcalde de Chiclayo Don Eugenio Moya, se fundaron en 1884 las Escuelas Municipales. Una de ellas estaba a cargo del Bachiller Don Juan de Dios Lora y Cordero, que tenía en calidad de auxiliar a Don José Antonio Jiménez, fallecido el 10 de enero de 1913. Como consecuencia de los ajetreos políticos del Dr. Juan de Dios Lora y Cordero, fue tomado preso, viéndose la municipalidad en la necesidad de reemplazarlo entregó la dirección titular al Sr. Jiménez quien permaneció en la escuela hasta 1907 formando a varias de las promociones… (p.24)