lunes, 15 de febrero de 2010

"El Paseo del Santo": La Devoción a Santo Toribio de Mogrovejo


El Distrito de Tayabamba se encuentra en la Provincia de Pataz de la Región La Libertad. La zona, geográficamente encantadora, guarda entre sus más caros recuerdos el de la presencia de Santo Toribio Alfonso de Mogrovejo. La memoria popular incluye al Santo Patrón de este pueblo en sus tradiciones e historias, lo han convertido en el icono principal de su fe y lo celebran como Patrón, con profunda devoción, durante el mes de abril desde hace muchos años.

Durante la colonia, Pataz fue un Partido compuesto por Collay, Pataz y cajamarquilla. Tayabamba era un pequeño centro poblado cuyos habitantes se dedicaban a la minería y a la agricultura. Las minas de Pahuarchuco y la Caldera, así como la represa que se encuentra en las alturas de los caseríos de Queros y Allauca (conocida hoy como Laguna de Gochapita) son una muestra de su sapiencia en ambas actividades.

No pretendo narrar los detalles de toda la festividad, pero deseo centrarme en un acto denominado “El Paseo del Santo”, hecho que me parece tan significativo como anecdótico.

Cuentan los pobladores que Santo Toribio hizo en Tayabamba muchas obras de caridad precisamente en el lugar donde se erigió “La Capilla de la Caridad” por lo que al continuar su viaje a Collay fue acompañado por muchos de los pobladores del lugar hasta un pequeño caserío llamado Pegoy.

En “El Paseo del Santo” se recuerda la bienvenida de los pobladores de Collay al primer Arzobispo de Lima, Toribio de Mogrovejo. Los pobladores de Collay y Tayabamba mandaron a preparar una imagen del Santo pero luego entraron en disputa por la efige. Al no ponerse de acuerdo decidieron partirla en dos. La cabeza se quedó en Collay y el cuerpo se fue a Tayabamba. Ahora tiene un rostro nuevo y está en el altar mayor del Templo.

En Collay nunca hicieron nuevo cuerpo para la cabeza del Santo, en cambio, hicieron otra imagen de poco más de medio metro de altura a la que atavían con un sombrero negro y un fino poncho blanco con delicadas líneas celestes. Delante de la imagen se encuentra un toro y, cargada en andas, recorre desde el 24 de abril el camino de Collay a Pegoy; la misma vía usada por el santo durante su tránsito por la zona.

Durante ese viaje, se dice, la mula que trasladaba el equipaje del Santo fue devorada por un puma. Santo Toribio indignado, pidió la presencia de aquel animal. Después de reprocharle por su maldad le ordenó cargar el equipaje hasta llegar a su destino.

El toro a los pies de la pequeña imagen del Santo representa el obsequio que hiciera el cacique de Chiquiacocha. Al no poder llevarlo, Santo Toribio dejó el animal al cuidado del mismo cacique. El animal escapó y fue hallado en una cueva en Huanapampa. No quiso salir, por lo que periódicamente se le llevaba sal y cebada, regalos por los que el toro retribuía con oro. Un comerciante de la zona se percató del hecho; quiso lazarlo en la cueva hasta que el animal dio un bramido tan fuerte que las rocas del cerro se desprendieron sepultando al comerciante y al toro al interior del cerro. Hasta hoy, muchos afirman ver por las noches al toro con oro sobre su lomo paseando por las trigales de Santo Toribio.

A propósito, el Santo es propietario de una parcela de trigo sembrada cada año por los mayordomos de su fiesta. Con la cosecha se puede solventar parte de los gastos de la celebración.