sábado, 6 de septiembre de 2008

"No solo el negro come gato"

Un viejo texto popular atribuido a los negros del sur del Perú dice a la letra: “Oye mulato/ ¿Quién se comió mi gato?/ Dicen que fue Calón un negro ñato/ ni siquiera me ha dejao el pellejo pal tambó/ oye mulato ¿Quién se comió mi gato?
Sin duda alguna el consumo de carne de gato es tan tradicional como oculto en la casi totalidad del territorio patrio, de manera que se mantiene como parte del gusto escondido y de las recetas solapadas de la gastronomía peruana.
No es raro que sea un gusto difundido entre las personas de piel negra desde tiempos de la colonia. Una muestra de tal consumo se presenta en la fiesta de “Santa Ifigenia”, patrona de los negros peruanos, en San Luís de Cañete, donde también se celebra cada año el “Festival del curruñau”. Consideremos que los esclavos negros debían alimentarse de las sobras de las comidas de sus amos españoles. Aprendieron a limpiar y preparar las vísceras (anticuchos, pancita, etc); pero aprovecharon la rápida multiplicación de los felinos que habían sido traídos de España para terminar con la proliferación de ratones llegados al callao junto con los barcos mercantes españoles (según refiere Ricardo palma) para convertirlos en parte de su dieta.
Los españoles también comían carne de gato. La primera receta escrita de la que se tiene referencia es de mediados del siglo XV. Ruperto de Nola (Cocinero mayor del rey Fernando) en su "Libro de Guisados, manjares y potajes" incluye la receta "Gato como se quiere comer". Si bien esta receta fue eliminada en ediciones posteriores, aún se conservan ejemplares de las ediciones de 1525 y 1529.
En “Consideraciones sobre todos los evangelios” de Fray Hernando de Santiago, escrito en Valladolid el año 1606 el autor dice: "Los avarientos, del gato nada estiman tanto como la piel; la carne no la come sino algún pobrete desdichado; pero los pellejos toman para guardar en ellos sus doblones" dando lugar a expresiones como "pelagatos" para referirse a quien no tiene bienes y “comegatos” para el que se ve precisado a consumir tal carne como consecuencia de su pobreza.
Sin embargo no solo los negros comen carne de gato. En Pomabamba (Ancash) se come el gato tanto como el cuy. A los pobladores que lo hacen se les llama Mishi kankas que significa “Devoradores de gato”
En Huari (Lima) la elevada demanda de la carne de gato ha producido la escasez de este animal lo cual preocupa a los pobladores por cuanto los platos a base de gato forman parte del espíritu festivo del pueblo, como los dulces y el licor de chirimoya. Al gato se le alimenta, en Huari, con leche, queso y pan; de vez en cuando se le da un ratón. En Chincha, según Cristian Gómez estudioso de la gastronomía peruana, se come el mejor “Seco de gato del Perú”. En Machu Picchu (Cuzco) los turistas consumían, sin saberlo, guisado de gato en el restaurante de Entur Perú.
Como un dato anecdótico refiero que, a pedido de la presidenta de la asociación de amigos de los animales del Perú, el año 2007 el señor Pedro Bautista Saravia, alcalde de cañete pidió a la asociación de arte y cultura negra del Perú no realizar una “Gatada” programada durante el festival del curruñau. La asociación respondió que no se trataba de un crimen sino de una costumbre que es parte de la identidad peruana.
En fin, la carne de gato es de consumo popular. A muchos les parece un hecho repugnante pero es una verdad histórica que en nuestro país se come gato desde hace varios siglos y los así como creo que los españoles enseñaron a los negros también sostengo que los negros enseñaron a los indios.

8 comentarios:

RomitaB dijo...

Como son capaces de matar a un inocente gatito?? realmente es repugnante matar a dulces criaturas como los gatitos. La gallina, la vaca y el conejo son hechos para comer...
que crueles, yo no ire a Peru de visita, que feo

Anónimo dijo...

Gaaato. Yum!! delicioso.

jacobini dijo...

Rommy, si no vas al Perú no sabes lo que te pierdes de la vida, Perú es uno de los paises más hermosos que he visitado!!! jajajjael hecho de comer gato no es bueno ni malo en sí mismo, es solo la programación cultural que traemos a cuestas!!! ¿quien te dijo que la vaca, el pollo.... fueron hechos para comer? en la India la vaca es un animal sagrado y sería un agravio a su divinidad comerse una vaca... animal que según tu fueron hechos para comer... jejeje quita esas telarañas de tu cabecita y ve a Perú y disfruta de las mil maravillas que ofrece.... de todo tipo. yomi yomi el Cuy es delicioso y más como lo preparan en Tipón, un poblado cerca de Cusco!!!

Anónimo dijo...

No visitar Peru!!!!!!!!!!!, porque comen gastos????, es una falta a la cultura, cada pais tiene sus costumbres, se imaginan un Indu matando una vaca? eso es repugnante para ellos, pero nosotros los occidentales nos morimos por un pedazo de carne de vaca bien jugoso y hasta sangriento. Viva Peru, su gente y su cultura. una venezolana abrazando a la cultura peruana!!!!!!!!!!!!!

Anónimo dijo...

MONSTRUOS, NADIE VISITE EL SUR DEL PERU CORREN PELIGRO DE COMERSE A SU MASCOTA SI POR ACCIDENTE LA LLEVAN

Miguel dijo...

Se nota que muchos tienen la "cabecita" muy cerradas. Sobre todo ese "Anónimo" que hace un llamado a la gente a no visitar el Perú. En la selva de Perú se comen hasta las hormigas. No sé que tanto se rasgan las vestiduras. Los animales que se pueden comer hay que comerlos y ya. Típicos animalistas...

Unknown dijo...

En Asia (Japón), ya es oficial comer carne humana,, y jugoso,, ustedes son candidatos y valen $ 2,000.. que tal tu chip amigos,,

Anónimo dijo...

Hay un error. Los esclavos negros recibían una alimentación basada en cereales o guarniciones como el arroz, frijoles y el trigo mote. Siempre incluía una porción de carne entre los 180 a 250 gr. (dependiendo del año). Acompañaban también con papas, camote, yuca o plátanos aplastados. Las fuentes están ahí en el AGN y en las hojas de rancheo de los esclavos caribeños incluso es mejor la alimentación. ¿Por qué? Bueno. Para lograr una optima producción se debía de mantener a los esclavos bien alimentados y con energías. SÍ. Tener un esclavo y mantenerlo era caro y por eso tener uno era un símbolo de estatus. Por eso en Lima algunos compraban esclavos para simplemente aparentar y los dejaban en la ciudad para que trabajen para otros o de forma independiente a cambio de unas monedas al día. Lo del consumo de vísceras viene de las tradiciones españolas de las zonas de donde vinieron los primeros españoles junto a mujeres moras. Platos como el anticucho vienen de la antigua tradición de los pinchos morunos y en especial de las asadurías de corazón y los pinchos de corazón de cabra que traían las moras y los españoles de Andalucía. De los Extremeños se adaptó su tradicional chanfaina de corazón o pulmón a la chanfainita que tenemos hoy. El escabeche y cosas como el cebiche también vienen de los andaluces y moros.
¿Qué es una comida de origen 100% para consumo esclavo? Pues el seco de carne con frejoles. Cumple: arroz, carne y frejoles. Con la obvia preparación en olla de barro heredada de los moros (seco tayin). Comidas con menestras, trozo de carne, cereal y tubérculos... eso es comida esclava. ¿Cómo llegaron entonces las preparaciones de los platos con vísceras a los afros? Pues expliquemos lo que son las esclavas domesticas. Estás cocinaban para sus amos las recetas de su consumo y por lo tanto cocinaban los anticuchos (pinchos morunos) para sus amos y quedaban como tradición y una vez conseguida la libertad o siendo esclavos que jornaleaban por su cuenta los vendían en las calles al ser muy populares. También existían indígenas que aprendieron a prepararlos y es ahí donde adoptan el nombre medio en quechua debido a que al existir una comida parecida le dan ese mismo nombre.